La primera vez que lo oí, pensé, tiene que ser lo más bonito que le pueden decir a uno.
«No cambies nunca».
Te están diciendo que eres increíble, que te necesitan, que eres óptimo y no puedes ser mejor.
Hace unos días lo volví a oír. Se ve, que con el tiempo he cambiado de opinión. Me suena a frase inacabada. No cambies nunca, porque si no… Me suena a amenaza, a disculpa, a extorsión, a intento de retener a alguien.
No quieres que cambie, pero, ¿por qué? Y si lo hago, ¿qué pasará? dejarás de quererme, no me aceptarás… en cualquier caso, no me querrás igual, ¿no es así?
Si no estás dispuesto a dejarme cambiar, me estás intentando robar una de las cosas más importantes para mí, mi libertad.
Quizás la próxima vez que alguien me diga «no cambies nunca», tenga que preguntarle, «¿de qué tienes miedo?».
elotro
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